La mejor frase que he leído esta semana:
“Clear is kind… telling others half truths to not make them feel bad is more about making yourself more comfortable… not being clear is unkind and unfair» / «Claridad es bondad… decirles a otros verdades a medias para no hacerlos sentir mal se trata más de que tú te sientas cómodo… no ser claro es malo e injusto».
Explica Brené Brown, con mucha razón, en su más reciente libro: Daring to lead.
Digo con mucha razón porque vivimos en una época donde la falta de claridad y las verdades a medias parecieran ser la moneda de cambio.
Unos intentando agradar a otros, otros tratando de no enfadar a los demás.
Incapaces de hablar con sinceridad y sin miedo.
Sedados por el miedo a la descalificación o al rechazo por hablar con claridad.
Anulados por la egoísta búsqueda de nuestra propia comodidad, intentamos «ponerle azúcar» a lo que decimos, esperando que la(s) otra(s) persona(s), nos sigan apreciando, aun cuando sea esta una falsa apreciación.
Fallamos dando indicaciones o recomendaciones a medias para después frustrarnos porque lo entregado está por abajo de lo que esperábamos.
Provocamos confusión al invitar a una reunión por no compartir con claridad el objetivo de esta y lo que esperamos obtener.
Fallamos una vez más al retroalimentar y compartir con claridad, transparencia y, siempre con respeto, nuestra perspectiva y expectativa.
Fallamos cuando no nos permitimos escuchar la retroalimentación que nos están dando, bloqueándonos para proteger nuestro delicado ego, cerrándonos a la oportunidad de ser y hacerlo mejor, engañándonos a nosotros mismos pensando que solo nos quieren criticar.
Clear is kind. Ser claro es actuar con bondad. Ser claro, con respeto y aprecio por los demás, es hacer los correcto y no lo popular.